El precio del barril de crudo, al alza
El final de las tensiones nucleares con Irán que ha propiciado el acuerdo suscrito por las principales potencias mundiales esta misma semana no ha supuesto, como se preveía, una caída del precio del barril de crudo Brent. En concreto, el precio del crudo del Norte –que se utiliza como referencia en los mercados europeos- ha cerrado en los mercados de futuros de Londres en 58,51 dólares, en la misma jornada en la que se aprobó el acuerdo (el pasado 14 de julio), una cifra que representa un aumento del 1,14 por ciento con respecto al precio que marcó el futuro al cierre de la sesión anterior.
Desde Global Estaciones de Servicio queremos profundizar, a lo largo de la entrada de esta semana, en esta noticia de actualidad que ha sorprendido a los expertos del sector, quienes auguraban una caída del precio del crudo motivada por el acuerdo con Irán.
El Brent, ¿a prueba de volatilidad?
Lo primero que hay que señalar es que el futuro del Brent sí que cayó (hasta un 2 por ciento, quedando en 56,8 dólares), durante el inicio de la sesión. Con todo, la volatilidad no ganó la partida y, según fue avanzando la sesión en los mercados, el precio fue remontando hasta cerrar alcista. Existe una evidente recuperación, aunque algunos especialistas apuntan también que el petróleo ha perdido la mitad de su valor en el último año.
¿En qué consiste el acuerdo con Irán?
El pacto fue firmado por los representantes de las principales potencias del mundo. Así, sellaron el acuerdo con Irán los miembros del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, junto al país que preside Ángela Merkel (un equipo que es conocido como el Grupo 5+1). Se trata de un hecho histórico que, según indican fuentes del sector, marca un antes y un después en la amenaza nuclear, ya que supone, aparentemente, el fin de años de conflicto.
Pero, ¿cuáles son las consecuencias de este hito? La primera de ellas supone que el país de Oriente Medio podrá volver a exportar su preciado crudo tanto a la Unión Europea como a Estados Unidos, ya que los países firmantes han levantado las sanciones impuestas al país que preside Hasán Rouhaní, de ideología islamista moderada.
Con todo, los firmantes han puesto de manifiesto que Irán tendrá que llevar a cabo los compromisos firmados antes de eliminar cualquier sanción, por lo que el levantamiento del embargo al petróleo no será inminente, sino que el país de Oriente Medio tendrá que ir dando pasos en ese sentido para lograr la libre exportación de su oro negro. De hecho, se calcula que en aproximadamente seis meses se levanten las sanciones por completo y sea en ese momento cuando llegue a Occidente, compitiendo así con el crudo de Arabia Saudí.
Irán es el segundo país con mayor capacidad para exportar crudo de todos los que componen la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo) y ocupa el puesto número 4 del ranking mundial por reservas certificadas. En este sentido, Irán podría abastecer China durante 40 años, lo que pone de manifiesto su potencial productor.
Así las cosas, el ministro de Petróleo iraní, Bijian Namdar Zanganeh, ha subrayado que, tras la firma del acuerdo, el país puede incrementar sus exportaciones en más de medio millón de barriles diarios, una cantidad que puede duplicarse a lo largo de los próximos seis meses.
Arabia Saudí contra el fracking de EE UU
El principal productor de oro negro del mundo es Arabia Saudí, que representa el 13 por ciento de la producción total. Su negativa a reducir la producción diaria puede estar detrás de la bajada del precio del crudo, que se ha registrado este pasado año. Su objetivo: combatir la técnica del fracking de Estados Unidos.