Este 2021 ha sido crucial en materia ambiental, son muchas las normativas implementadas para reducir las emisiones de los coches, promoviendo aquellos que sean ecológicos, una movilidad sostenible. Los coches eléctricos han sido los grandes favorecidos, y los coches de combustión los más perjudicados.
Y es que el aumento en el precio de la gasolina y el diesel ha sido constante durante estos últimos meses. En promedio, al llenar el tanque de tu coche a diesel o gasolina, estarás pagando unos 10 euros más en comparación con lo que pagabas el año pasado.
España, segundo país europeo con más aumento en el precio de la gasolina
El precio de la gasolina ha tenido aumentos históricos, no solo recuperó el precio que tenía antes de la pandemia, recordemos que a inicios de la pandemia, hubo una bajada en los precios de la gasolina, sino que en definitiva lo ha superado, y por mucho.
Según los expertos, si se compara el precio de la gasolina y el diesel actual, con el coste durante el mes de mayo del año pasado, es en promedio un 24% más costosa, en el caso de la gasolina y 21,24% en el caso del diesel.
En lo que va de este año, el precio de la gasolina ha experimentado un aumento del 12,6%, mientras que el diesel ha presentado un aumento de 11,5%.
- La gasolina sin plomo 95, tiene un coste actual de 1,397 euros por litro.
- Por su parte, la gasolina sin plomo 95 tiene un coste de 1,555 euros por litro.
- El gasóleo B y C han alcanzado los 0.940 céntimos por cada litro de combustible.
La OCU ha advertido que de mantenerse esta tendencia de alza, el coste extra que los conductores españoles tendrán que pagar por estos carburantes puede llegar a los 180 euros. Es por eso que precisamente la OCU continúa con su proyecto para comprar gasolina barata, a través de la compra colectiva de este tipo de combustible.
Bajada de los precios durante la pandemia
A propósito del aumento registrado en los carburantes, es propicio recordar que tras el inicio de la pandemia, el precio del diesel y de la gasolina tuvo una caída, esto debido a que los desplazamientos se detuvieron, lo que disminuyó la demanda del combustible.
Pero, respecto a la bajada de abril del 2020, el aumento ha sido progresivo, causando preocupación en quienes aún siguen apostando por los coches de combustión. El aumento ha sido tal, que ha posicionado a España como el segundo país de Europa, con la gasolina más alta.