La NASA se plantea construir una gasolinera espacial
Rebuscando en la red hemos encontrado esta noticia en el sitio espacioprofundo.es que hace referencia a la intención de la NASA de construir una gasolinera en el espacio para así abaratar los costes de los viajes espaciales. Ya que nuestro trabajo es construir gasolineras y estaciones de servicio nos ha llamado bastante la atención y creemos que es una muy importante obra de ingeniería y un reto para los que vayan a construirla. Tendremos que hacer llegar una oferta a esta gente a ver si empezamos a trabajar juntos…
Aquí os dejamos el artículo:
Uno de los problemas que influye directamente en el elevado coste de los sistemas enviados al espacio es el hecho de que no podemos realizar un mantenimiento periódico en los satélites una vez alcanzan su órbita.
En el momento en que abandona la tierra, el satélite está destinado a sobrevivir o fracasar, apañándoselas únicamente con lo que lleva encima y la calidad de sus componentes. Si todos los subsistemas funcionan correctamente, entonces es de esperar que el dispositivo trabaje adecuadamente… hasta que se le acabe el combustible, pero una vez se agota, la misión ha terminado.
Así ha sido como han trabajado todas las operaciones espaciales desde 1957. La ventaja de poder reabastecer un satélite en órbita, o repararlo, es evidente, si tuviéramos una estación de servicio en órbita que capturase el dispositivo espacial, repararlo y repostarlo de combustible el costo total de utilizar el espacio podría descender drásticamente, no es lo mismo comprarte un coche cada cinco años que realizar una pequeña reparación o cambiarlo simplemente porque se ha vaciado el depósito.
Es por eso que la NASA está desarrollando la tecnología para construir “estaciones de servicio” en la órbita terrestre que algún día podrían utilizar tecnología robótica para reparar y reabastecer los satélites. Después de 55 años de experiencia en vuelos espaciales, ya era hora de que alguien asumiese este reto, serio e importante.
Los ingenieros del Centro Espacial Kennedy están trabajando con el Centro de Vuelo Espacial Goddard para desarrollar los conceptos que conduzcan a los “surtidores” de alta tecnología, mecánicos robóticos y “grúas” espaciales que rescaten los satélites en el espacio. Esta capacidad es particularmente atractiva ya que proporcionaría servicio a los satélites geoestacionarios de gran tamaño.
Estos satélites realizan una serie de aplicaciones espaciales muy dispares, como sistemas de telecomunicaciones que atienden a decenas de millones de clientes en todo el mundo. Sistemas que son muy complejos, muy caros de diseñar y construir, por no hablar del elevado coste de un nuevo lanzamiento y el riesgo de generar más basura espacial.
El tiempo de vida útil medio es de unos 15 años, pero cuando el propelente se agota, su utilidad general termina. Si hubiera una estación de servicio en órbita geoestacionaria, la vida de los satélites podría extenderse por solo una fracción del costo de la sustitución de estas naves.
La idea de proporcionar estos servicios ha estado rondando las cabezas de los ingenieros durante décadas, pero poco se ha logrado hasta ahora. La NASA y las empresas del sector privado están tratando de avanzar en las tecnologías y sistemas que esperan puedan convertir este nuevo concepto en una realidad. Los incentivos para la NASA y empresas del sector aeroespacial son muchos, los beneficios económicos grandes, así que hay que seguir adelante.
La clave es encontrar una solución que represente un bajo coste por satélite reparado o reabastecido, es decir, que el coste ha de ser mucho menor que el de reemplazar los satélites.
Hay que tener en cuenta que los satélites que utilizarían este sistema de mantenimiento son aquellos que llevan en órbita desde hace algún tiempo, por lo tanto, su valor ya es reducido, si a una empresa le cuesta lo mismo reparar un satélite o enviar uno nuevo con mayores capacidades tecnológicas, no lo dudara. Por lo tanto, habrá que hacer un argumento convincente para proporcionar un servicio frente al reemplazo.
La clave para el éxito del negocio de una “estación de servicio” para satélites parece ser la capacidad para dar servicio a múltiples satélites y una reparación o reabastecimiento de combustible simple.
La función de mantenimiento más importante parece ser repostaje de los satélites geoestacionarios, hay unos 200 de ellos activos, aproximadamente 15 se quedan sin combustible cada año.
Parece un buen negocio para una empresa gasolinera espacial, pero serán malas noticias para los fabricantes de satélites. Sin embargo, la competitividad, la innovación y el incentivo de un beneficio económico seguramente encontrarán una solución que sea la que se lleve el gato al agua, más pronto o más tarde.