Fabricación de un túnel de lavado para vehículos
A la mayoría de nosotros nos gusta llevar el coche reluciente, para ello, existen varias formas de hacerlo, una es el lavado manual, el cual conlleva mucho trabajo, tiempo y esfuerzo. Y por otro lado tenemos el lavado automático en los túneles de lavado de una estación de servicio. Pero, alguna vez os habéis preguntado, cómo se fabrican estos túneles de lavado, qué medidas han de tener, que directrices deben seguir para su puesta a punto en el mercado ó cual es su funcionamiento. Todo eso y mucho más os lo mostramos en este interesante artículo.
Los túneles de lavado son grandes máquinas de tecnología punta, en los cuales introducimos nuestro vehículo en su interior y tras estar bien encajado en los raíles correspondientes, seleccionamos el tipo de lavado (existen varios modelos dependiendo de la estación de servicio) y tras introducir la ficha con nuestro programa de lavado, los rodillos que forman dicho túnel, comenzarán a funcionar y a limpiar nuestro vehículo.
Estos rodillos despiden un surtido de jabones y ceras que combinado con la fricción que producen al contactar con la chapa de nuestro coche, se obtienen unos esultados impecables.
El proceso de fabricación de un túnel de lavado, comienza con la soldadura de la estructura que soportará más tarde el resto de maquinaria, como por ejemplo rodillos y ejes. Tras tener la estructura montada, se instalan las paredes de cristal y fibra de vidrio laterales, estas hacen las veces de “paredes” del túnel. Una vez colocadas, se fabrican las ruedas que harán que se mueva la maquinaria hacia adelante y hacia atrás para que no quede ninguna parte del coche sin lavar. Una vez que estén las ruedas terminadas, se sueldan al eje motriz principal de la cabina de lavado en su parte inferior.
Tras esto, se montan los rodillos que serán los principales encargados de limpiar nuestro vehículo. Las fibras que contienen los rodillos de un túnel de lavado, están realizadas con un material llamado PoliFlex, que repele las partículas de polvo y es muy suave con la carrocería de nuestro vehículo. Hay que mencionar que no todos los cepillos de un rodillo son iguales, el objetivo de esto es que el rodillo pueda llegar a todas las partes del vehículo. Normalmente, los cepillos laterales de un túnel de lavado, constan de un total de siete columnas de cepillos PoliFlex.
Los profesionales encargados de fabricar un túnel de lavado, son los que realizan los conductos y accesos pertinentes para la distribución de los jabones y de otros aspectos mecánicos de túnel de lavado, así como instalar la bomba hidráulica que va adherida a la estructura del túnel. Todos estos componentes no podrían funcionar sin la ayuda de un ordenador conectado a este sistema. Los operarios son los encargados de colocar e instalar todo el cableado necesario para que dicho ordenador controle el túnel de lavado.
Llega el turno de instalar la cortina superior a través de un armazón ubicado en la parte superior del túnel y controlado por brazos hidráulicos que a su vez están conectados al ordenador central del túnel de lavado. Es muy importante que los cepillos y la cortina superior giren y se complementen en plena armonía. Tras colocar, montar y configurar todos los dispositivos de lavado, llega el turno de los dispositivos de secado del vehículo.
Al igual que el resto de los componentes, el sistema de secado va acoplado a la estructura principal del túnel de lavado por medio de soldaduras y diversos sistemas de seguridad establecidos para su correcto funcionamiento. Como hemos visto anteriormente, también tienen su propio cableado que va conectado al ordenador central del túnel de lavado. Cómo es lógico, el sistema de secado está establecido para funcionar justo después del programa de lavado del vehículo.
Indudablemente, antes de ubicar el túnel de lavado en su correspondiente estación de servicio, se han de efectuar las pruebas pertinentes para saber si todos los componentes están funcionando correctamente. Tras esto se dispone a su instalación en la estación de servicio pertinente.